En la Cisjordania ocupada
El ministro de Sanidad palestino recordó que “es un crimen de guerra” disparar a los sanitarios
Un paramédico voluntario palestino de 17 años murió ayer por un disparo en incidentes con el Ejército israelí en el campo de refugiados Dheisheh, en la ciudad de Belén, en la Cisjordania ocupada. El Ministerio de Sanidad palestino confirmó la muerte de Sajed Mezher tras recibir un disparo en la zona abdominal, en el marco de choques entre el ejército israelí y jóvenes locales en la madrugada de ayer.
Otros tres palestinos resultaron heridos de bala y trasladados a hospitales de la zona, uno por un disparo en el hombro, otro en el muslo y el tercero en la mano, informó la agencia oficial de noticias palestina Wafa.
Además, tres personas fueron arrestadas tras los enfrentamientos y más de 20 fueron detenidos en otras ciudades palestinas en Cisjordania, principalmente en los alrededores de Ramala. El ministro de Sanidad palestino, Jawad Awad, condenó el incidente y la actuación del Ejército israelí: “Es un crimen de guerra de un ejército que viola todos los tratados y convenciones internacionales que exigen la protección de paramédicos en conflicto”.
El Ministerio expresó su preocupación por la muerte del paramédico, el cuarto trabajador médico fallecido desde principios del año pasado, y acusó a Israel de apuntar deliberadamente contra el personal sanitario para obstruir su trabajo y evitar la atención de heridos.
La semana pasada cuatro palestinos murieron en tres incidentes distintos en Cisjordania. Uno fue el atacante que mató a dos israelíes junto al asentamiento de Ariel, dos tras lanzar cócteles molotov hacia un grupo de israelíes en la ciudad de Nablus y el último, el pasado miércoles, también en la ciudad de Belén tras lanzar piedras contra automóviles de la zona. Los incidentes de ayer se dan en el marco de una escalada de violencia entre israelíes y palestinos, principalmente en la Franja de Gaza.
(Efe, Deia)