Desde SOS Racismo y la Plataforma de Manteros sostienen que vender para sobrevivir no es delito
Durante los nueve días de fiesta se puede ver en diferentes calles de Bilbao a personas que se dedican a la venta ambulante y al top manta. Ledesma, el puente de El Arenal o el Casco Viejo son los lugares clave. Días antes de comenzar Aste Nagusia, SOS Racismo y la Plataforma de Manteros Mbolo Moye Doole convocaron una campaña de apoyo y pidieron al Ayuntamiento la no persecución de los trabajadores durante este periodo, ya que “sobrevivir no es delito, ser mantero tampoco”. Las organizaciones apelaron a la buena voluntad política de las autoridades municipales para lograr una convivencia pacífica durante las fiestas de la villa.
Los vendedores ambulantes no eligen este trabajo. “Al no poder conseguir la tarjeta de residencia, la única manera que tenemos de sobrevivir es con el top manta”, dijo Baba, que vino a Euskadi desde Senegal y a la edad de 35 años sigue ganándose la vida con la venta. Por esta cuestión de supervivencia los manteros piden a la policía que sea más comprensiva, “no quieren robar ni hacer nada malo”. “Somos humanos y luchar por una vida digna, por tener algo que comer y beber, no debería ser un delito”, añadió Baba, que también es miembro de SOS Racismo Bizkaia.
“Me gustaría ser un trabajador, no un mantero”, explicó otro vendedor ambulante que estaba ayer en el Casco Viejo. Desde 2012 ha tenido que “dar la cara” para conseguir algo para vivir, esto es, dedicarse el top manta. “Cuando la policía nos persigue y nos requisan el material, perdemos mucho dinero. No es nada fácil y no queremos robar”, añadió. La manta es la única fuente de ingresos que tienen estas personas.
Por otro lado, a estos vendedores se les junta el problema de las quejas de los comerciantes. “Nosotros compramos y luego vendemos los productos, pero tenemos muy pocos. No es que no haya competencia, es que no podemos competir con ellos”, aseguró Baba. La portavoz de SOS Racismo, Elena Bezanilla, ya opinó en el inicio de la campaña que “nadie hace competencia a nadie”. Sin embargo, desde BilbaoDenkak, plataforma integrada por doce asociaciones de comercio y hostelería de la villa animó el pasado jueves al Ayuntamiento y a los cuerpos policiales a “continuar actuando contra la venta ambulante ilegal”.
- Concentraciones.
Desde SOS Racismo Bizkaia y Mbolo Moye Doole han realizado dos concentraciones frente al Ayuntamiento para hacer frente a la persecución de los manteros. La segunda tuvo lugar ayer, derivada del problema que a última hora del miércoles, sobre las 23.10 horas, sorprendió a la villa. Mientras que desde el Ayuntamiento y Policía Municipal aseguraron que “evacuaron” a los vendedores ambulantes del puente de El Arenal porque “obstaculizaban el paso del público”, las asociaciones sostienen que “la Policía Municipal efectuó una nueva persecución racista”. De ahí el motivo de dicha concentración.
Aún quedan dos días de celebración y se seguirán viendo a los vendedores ambulantes con sus productos: pañuelitos azules, abanicos o pulseras. Manteros como Baba seguirán “luchando para que pare la persecución policial” y todos puedan “convivir en paz”. Vendedores ambulantes que intentan sobrevivir ha habido, hay y habrá en todas las fiestas.
(Celia Carrera, Deia)